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Persisten ataques contra movimientos opuestos al plan minero carbonífero en el Zulia

El profesor Lusbi Portillo amenazado de muerte

Publicado el Martes, 14/12/04 08:12pm

En nombre de Brendan Hynes, presidente de la empresa irlandesa Carbonífera Caño Seco, promueven reunión con desempleados en Cachirí, para buscar apoyo a sus proyectos mineros. En la reunión funcionario del Ministerio de Energía y Minas acusó a activista ecologista de terrorista.

Para responder a las acciones que vienen desarrollando más de 350 familias indígenas de la etnia Wayúu, organizaciones populares de base, medios alternativos y grupos ecologistas del Zulia en defensas de las tierras indígenas, los bosques y las aguas del Zulia, los señores de la empresa de Brendan Hynes confabulan con sectores políticos de los municipios de Mara y Jesús Enrique Lossada y CORPOZULIA la realización de una serie de eventos con los desempleados de la zona fronteriza para conseguir el apoyo a sus planes de explotación minera.  

Hynes no dio la cara sino Sirimo y Manuel

Luego de varias reuniones realizadas con representantes de la empresa Carbonífera Caño Seco que operan en la zona, en nombre de la Alcaldía del municipio Mara, los señores Sirimo Moreno Chourio y Manuel Carrillo Presidente y Vicepresidente respectivamente de la Junta Parroquial Cachirí asume la convocatoria y desde el 27 de noviembre comienzan invitar para el sábado 11 de diciembre de 2004 a las 10 de la mañana a los habitantes de la parroquia Monseñor Marcos Sergio Godoy a través de unas hojas firmadas por ellos pegadas en las paredes: "Punto a tratar: apoyo a las empresas carboníferas que se van a instalar en la Parroquia Monseñor Godoy, como lo son: Mina Socuy, Mina Cachirí y Carbonífera Caño Seco".

Hasta que no hizo acto de presencia el ingeniero Juan Rojas, los vehículos de la empresa Caño Seco no dejaron de rondar el lugar de la reunión.

La reunión fue entaparada

Llegaron al caney de la reunión una camioneta y un enorme bus con los emblemas de la Alcaldía del municipio Jesús Enrique Lossada trasladando desempleados de la Concepción, se decía que comandados en persona por el concejal Joenio Negrete, otro vehículo de CORPOZULIA trasladó a Argenis Perdomo Prieto de la Gerencia Minera, una camioneta del MARN al ingeniero Pedro José Guillen, también llegaron el técnico de campo de la empresa originaria de Alabama, Estados Unidos, Greenfuels de Venezuela, el geólogo Mario Herrera y Juan Roja, de INGEOMIN/MEM, quien de inmediato tomo el control del evento.

El ingeniero Rojas se negó a ser grabado, amenazó con retirarse. Por orden suya no se permitió la grabación del evento, posteriormente fue secundado por una señora y el presidente de la Junta Parroquial, quienes a su vez no permitieron intervenciones de los criadores, productores y artesanos Wayúu asentados en las cuencas de los ríos Socuy, Maché y Cachirí en donde CORPOZULIA/CARBOZULIA y las trasnacionales Carboníferas Caño Seco, Anglo American Coal, Ruhrkohle, Inter-American y Chevron pretenden desalojarlos para abrir las nuevas minas de carbón.

Sólo dos representantes del pueblo Wayúu pudieron intervenir porque en principio los consideraban sus aliados, pero en el desarrollo de sus exposiciones fueron abucheados por los gritos de los desempleados y silenciados, al quitarles de las manos el micrófono.

Todo estas acciones violatorias a las reglas más elementales al respeto de la dignidad humana y a los derechos humanos ocurrieron con la mirada cómplice de las instituciones gubernamentales que allí conformaban el presidio, en ningún momento los funcionarios Guillén, Perdomo, Negrete, entre otros, se daban por enterados.

Afuera del caney se encontraba muchas más personas de las comunidades Wayúu aledañas, que los asistentes del eventos, y recogieron más firmas en contra de la explotación del carbón que las ordenadas por la empresa Carbonífera Caño Seco.

La empresa envenena las aguas

Afuera, tres criadores del poblado San Miguel con una botella llena de agua en sus manos le mostraban al periodista de la BBC de Londres que sus animales se les estaban muriendo desde que las lluvias sacaban los químicos que la empresa Carbonífera Caño Seco vertía en los pozos de perforación que venía realizando en los trabajos exploratorios ejecutados en la hacienda Casa Blanca.

Esta denuncia fue realizada el día lunes 13 por diez criadores de la zona ante el Instituto Nacional de Tierra (INTI) de Maracaibo y el martes 14 en el programa de la mañana de la emisora Fe y Alegría. Los representantes del INTI se comprometieron a elevar la denuncia a la Fiscalía 24 del Ministerio Público, para ello se levantó una minuta.

Al estilo del General Martínez Mendoza, se repite las acusaciones contra los ecologistas

Antes de iniciarse la reunión el ingeniero Juan Rojas, ex-funcionario en Mina Norte de la Inter American Coal y Chevron (Carbones de La Guajira), afirmaba a varias personas presentes que Lusbi Portillo, era un terrorista, que en Machiques le había despojado de tres vehículos al MEM y, a él de un dinero, posteriormente en el transcurso del evento con micrófono en mano, sin decir el nombre del ecologista y profesor universitario Lusbi Portillo, trataba de influenciar a la audiencia diciendo que en la zona merodeaba un terrorista que en Machiques les había quitado tres vehículos y dinero.

El presidente de CORPOZULIA, General Carlos Eduardo Martínez Mendoza, nos acusaba ante la asistencia de dirigentes internacionales en el SEGUNDO CONGRESO BOLIVARIANO DE LOS PUEBLOS, celebrada en el Hotel Maruma de Maracaibo de mafias verdes, de agentes contra revolucionarios financiados por la CIA.  En el mismo ánimo, pero con distintos argumentos, el funcionario de INGEOMIN/MEM, ingeniero Juan Roja, en los límites fronterizos con la República de Colombia, en la reunión de Cachirí de terroristas. Los acusados pensamos que terroristas y agentes de la CIA en este mundo dominado por las trasnacionales de la minería, de las armas y de la bioenergía es lo mismo.

El funcionario del Ministerio de Energía y Minas, ingeniero Juan Rojas, debe aclarar ante el país si su participación y sus opiniones emitidas en el evento obedecen a opiniones personales o se trata de una particular política antiterrorista del Ministerio de Energía y Minas, si él estaba autorizado por su jefe inmediato a asistir al evento o fue a la reunión por cuenta propia, o si su activa y perniciosa actuación fue a ad honórem o financiada por los capitales mineros trasnacionales que allí se mueven, que por ninguna razón del mundo están dispuestos a perder los 300 millardos de dólares que por explotación de carbón se encuentran en el subsuelo de estas montañas pobladas de familias Wayúu y en las márgenes de estos ríos que van a las represas Manuelote y Tulé.

La sentencia a muerte a los activistas y dirigentes indígenas

La mayor parte de las acusaciones que lanzó ante los dirigentes indígenas y reporteros el funcionario Juan Roja recayeron contra el activista ecologista Lusbi Portillo, profesor de LUZ y coordinador de la ONG Sociedad Homo et Natura.

Hacer, en esta zona de frontera bajo la influencia del Plan Colombia, estas aseveraciones contra un dirigente ecologista, de la tradición de Lusbi Portillo, comprometido con las luchas antiimperialistas y anticapitalistas, con la lucha de los pueblos indígenas por sus tierras, y la conservación de los bosques y las aguas del Zulia, zona constantemente agredida por agentes trasnacionales, paramilitares y por presuntas incursiones anti guerrilleras, es condenarlo a muerte. Toda la mala intención del mundo se preparó para ser vertida en esta reunión a través de Juan Rojas desde los cenáculos oscuros de las oficinas mineras de Corpozulia y de las trasnacionales que ven amenazados sus negocios ante la movilización permanente de indígenas y ecologistas, y luchadores sociales y estudiantiles.

Juan Rojas manipuló la reunión

El funcionario Juan Rojas, en lugar de apelar al engaño y a la mentira, debió informar en el evento lo que en verdad sucedió cuando un personal del Instituto Nacional de Geología y Minas (INGEOMIN) adscrito al Ministerio de Energía y Minas fue expulsado de todo el territorio Barí y de la comunidad Yukpa Chaktapa cuando pretendieron asesar a sus tierras para realizar trabajos de exploración minera, en esa ocasión por orden de la Asociación de Comunidades Barí de Venezuela (ASOCBARIVEN) la comunidad Karañakae le retuvo por varios días un vehículo, hasta que el día viernes 5 de abril de 2002 en la sede de ASOCBARIVEN en la ciudad de Machiques la Directiva indígena convoca a una reunión a los distintos organismos e instituciones gubernamentales y en presencia del Obispo de Machiques Ramiro Díaz, representantes de la Alcaldía, de la Oficina Regional de Asuntos Indígenas del Ministerio de Educación, Cultura y Deporte, de la Guardia Nacional, del Ejército, de la Asociación de Ganaderos de Machiques (GADEMA), del MARN, Instituto Nacional de Parques, entre otros, los Barí se dispusieron después de un largo debate de entregar el vehículo si el ingeniero Juan Rojas se comprometía a no volver a entrar a su territorio, propuesta que el ingeniero Roja acepto, después de comprometerse de arreglarles el motor a la camioneta vieja que para aquel entonces tenía Karañakae, esto la hizo con la mal sana intención de dejar una puerta abierta con la comunidad. Pero hasta la fecha nada ha conseguido.

El único representante de una organización no gubernamental que la Directiva de ASOCBARIVEN invitó a la reunión fue a la Sociedad Homo et Natura, en la persona de su Coordinador General, Lusbi Portillo, quien acompañó a los dirigentes indígenas en la argumentación por qué no se debería explotar carbón en las tierras de los indígenas, más cuando constitucionalmente el Estado está obligado a preservar o ampliar sus territorios autodemarcados por los indígenas.

En aquel entonces al profesor Portillo no se le señaló de haber participado en esta actividad, tal como hoy señala el funcionario de INGEOMIN.

La historia de Machiques se repite

El ingeniero Juan Rojas en ningún momento trató de honrar su compromiso, todo lo contrario con personeros de la Alcaldía de Machiques comienza a realizar reuniones con indígenas y desempleados de la zona, tal como ahora ocurrió en Cachirí, para debilitar la posición de ASOCBARIVEN, estas maniobras fueron denunciadas públicamente por los indígenas Barí y la ONG Sociedad Homo Natura, y a través de una correspondencia de fecha 22 de mayo de 2002 dirigida a la ingeniero Zonia Osorio de Fernández, Directora de INGEOMIN.

¿Qué va a pasar?

La pregunta obligada nos lleva a pensar si en verdad el señor Rojas tiene para demostrar ante el país o ante un tribunal las pruebas de las supuestas actividades terroristas que el profesor Lusbi Portillo y otros activistas sociales venezolanos desarrollan en la frontera. Si no las tienen este señor debe responder o en todo caso el Ministro de Minas en donde el informó que trabaja y representaba en dicha reunión.

Federación Ecologista del Zulia (FEZ) y Sociedad Homo et Natura (HetN), Colectivo ANPA (noticias del pueblo), Asociación Nacional de Medios Comunitarios, Libres y Alternativos (ANMCLA, Coordinación Zulia), PNA-Movimiento 13 de Abril (Zulia).