Henry Romero |
En una cuerda marzo de 2007 |
Hay miradas exploradoras en una lucha interna colgando en el mismo sitio una sola cuerda.
Todos menos yo ellos tamben dirían eso.
Cada quien sigue la pauta un mismo ritmo ¿a quien le importa? son sus dueños, he oído eso.
Frente a mi; un teatro sus cuerdas son cortas ¡pero las hay más largas!.
Las marionetas tienen ojos pintados oídos cocidos
hace tiempo entregaron su “yo” es lo indignante.
Un bamboleo se justifica con música.
Todos están allí, en fila esperando ser elegidos como artículos de estantes.
Da pena verlos marchar ver vaciar los anaqueles.
Se oye un decir: ¡colgando pero feliz! No lo creo.
Surge un pregunta ¿Qué tienen? Tal vez respondan todos.
No soy Dios ni pretendo serlo.
Como no ver y oír a quien pertenecen.
Solo ellos saben.
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